Desde el inicio del siglo XXI en todo el mundo se han acrecentado las preocupaciones sobre los temas sociales que han causado serios trastornos afectando la educación de niños y jóvenes, la percepción de la ética, costumbres y comportamiento y finalmente a la paz mundial.
México comparte este fenómeno. Las inquietudes de nuestra juventud se han concentrado en temas que se magnifican a través de las redes sociales.
Cada día se conoce de temas de abusos de autoridad, adicciones, violencia intrafamiliar, maltrato a mujeres, niños y adolescentes, violación a los derechos humanos, intolerancia, crueldad a los animales, deterioro del medio ambiente, descuido en el uso del agua, entre muchos problemas de actualidad a los que nos hemos habituado, por ignorancia o indiferencia.
Los jóvenes de todas las generaciones, tanto en nuestro país como en el mundo, son históricamente los actores en la denuncia y la concientización de los males que aquejan a su época. Hoy, ellos son testigos de la cada vez mayor distancia entre los poderosos y los débiles, tanto en lo económico como en lo social y en lo político, brecha que se está volviendo infranqueable. Vislumbrar la inercia de esta tendencia fomenta sentimientos de frustración que, a su vez, generan escapismo y agresividad.
Esta exposición, en la gran mayoría, está integrada por obras de artistas jóvenes. Es tanto una denuncia como un llamado a entender, atender y buscar soluciones para los angustiosos problemas que afectan actualmente a esta y a futuras generaciones.
José Pinto Mazal